domingo, 24 de septiembre de 2023

Cambio radical en la vejez para sobrevivir


 

En la tranquilidad de mis últimos años, me encontré enfrentando un cambio de vida radical para sobrevivir en un mundo que había evolucionado mucho más allá de lo que conocía. Aunque la vejez suele ser asociada con la paz y la reflexión, para mí, fue un momento de adaptación y resiliencia.

A medida que envejecía, me di cuenta de que la tecnología estaba cambiando todo a mi alrededor. Las formas en que las personas se comunicaban, trabajaban y vivían habían evolucionado enormemente. Mis nietos me alentaron a aprender sobre computadoras, smartphones y redes sociales. Al principio, me sentí abrumada y fuera de lugar, pero sabía que necesitaba mantenerme al día para sobrevivir en este mundo en constante cambio.

Me inscribí en clases de informática para personas mayores, donde aprendí lo básico: navegar por Internet, enviar correos electrónicos y usar aplicaciones de mensajería. Poco a poco, fui adquiriendo confianza y explorando más. Me familiaricé con las redes sociales y comencé a conectarme con amigos y familiares en línea.

El siguiente paso fue buscar oportunidades para trabajar desde casa. Me di cuenta de que había numerosas posibilidades en línea, desde vender artesanías hasta ofrecer tutorías en línea. Me decidí por compartir mi experiencia y conocimientos a través de clases en línea sobre cocina, algo que había sido una pasión durante toda mi vida

Adaptarme a esta nueva forma de vida fue todo un desafío. Aprendí a equilibrar mi tiempo entre el mundo virtual y el mundo real. La soledad a menudo acechaba, pero mantenerme ocupado con proyectos en línea y mantenerme conectado con mis seres queridos me ayudó a superar esos momentos difíciles.

A pesar de los desafíos, este cambio de vida en la vejez me brindó una nueva perspectiva y una mayor apreciación por la adaptabilidad y la capacidad de aprender a cualquier edad. Aunque el mundo ha cambiado mucho, encontré formas de sobrevivir y prosperar, y eso me llenó de gratitud y alegría en esta etapa final de mi vida.






miércoles, 20 de septiembre de 2023

Día de trabajo agotador


Hoy fue un día realmente complicado en el trabajo. Comenzó con una alarma estridente que me sacó de la cama demasiado temprano. Me había acostado tarde la noche anterior preparando un informe importante para una reunión crucial en la oficina.

Rápidamente me vestí y desayuné algo ligero mientras revisaba mis correos electrónicos. Había una cantidad abrumadora de mensajes urgentes y pendientes que requerían atención inmediata. Me sentí abrumado desde el principio, pero sabía que tenía que mantener la calma y abordar cada tarea una por una.

Durante la mañana, las reuniones se sucedieron una tras otra sin un descanso real entre ellas. Estaba constantemente saltando de un tema a otro, tratando de mantenerme enfocado y seguir el ritmo de las conversaciones. La presión para dar respuestas rápidas y decisiones acertadas era abrumadora.

A media tarde, surgió un problema inesperado con un cliente importante. Hubo un malentendido en las expectativas y estaban descontentos con el producto que les habíamos entregado. Tuve que dedicar una gran parte de mi tiempo a hablar con el cliente, comprender sus preocupaciones y buscar soluciones que los satisfacieran.

A medida que avanzaba la tarde, me di cuenta de que el informe que debía presentar en la reunión al día siguiente necesitaba una revisión adicional. Esto significaba quedarme hasta tarde en la oficina, reorganizando datos, ajustando gráficos y asegurándome de que todo estuviera en orden para la presentación.

Finalmente, cuando terminé todo y estaba a punto de salir de la oficina, me di cuenta de que era bastante tarde y que había sacrificado mi tiempo personal y mi descanso. Estaba agotado física y mentalmente, pero también sabía que todo el esfuerzo valdría la pena si lograba presentar un informe exitoso al día siguiente.

A pesar de las dificultades, sé que estos desafíos son parte del mundo laboral y estoy dispuesto a enfrentarlos con determinación y perseverancia. Mañana será otro día, y espero que sea un poco más tranquilo y productivo.